El pasado viernes, 8 de Mayo, pudimos disfrutar de un día espléndido, algo nublado, pero muy alegre. Era la procesión del patrón de Pozoblanco, San Gregorio, el cuál pasa todos los años por la puerta donde se encuentra nuestra Madre. Este año el patrón iba a ser recibido en su calle por alguien más, por su Virgen de la Encarnación.
Las 11:15h eran aproximadamente, cuando la Banda Municipal Sinfónica de Pozoblanco se disponía a subir la calle San Gregorio acompañada del estandarte de la Cofradía y de la directiva de la misma. Un componente de la Cofradía colocó un pin con el escudo de San Gregorio en el fajín de María Santísima de la Encarnación, mientras sonaba de fondo El Canto a San Gregorio interpretada por la Banda Municipal. Muy emocionados, esperábamos la ansiosa llegada de nuestro patrón.
Aparecía la
Cruz de Guía de la Cofradía por la calle, y ya empezaban a aparecer los nervios. Las andas se posaron en un altar preparado por la directiva de la Encarnación. Mientras hacíamos la entrega de un ramo de flores, sonaban de fondo los sones de la marcha "Virgen de la Encarnación" con la cuál, terminó de subir la calle la procesión.
Pasada ya la banda, personas, etc, Eusebio Castilla se disponía a coger su guitarra y a cantar la canción titulada "Himno a la Virgen de la Encarnación", compuesta por él. La calle se quedó en silencio, apenas se escuchaba la banda a los lejos, y él comenzó. Todos nosotros formando una medialuna delante de Ella, gente asomadas a los balcones y personas que pasaban y se paraban a ver el momento, cantábamos juntos. Así, terminábamos otro de los grandes días que hemos tenido con Ella de los muchos que habrán.
Muchas gracias por todo.
Las 11:15h eran aproximadamente, cuando la Banda Municipal Sinfónica de Pozoblanco se disponía a subir la calle San Gregorio acompañada del estandarte de la Cofradía y de la directiva de la misma. Un componente de la Cofradía colocó un pin con el escudo de San Gregorio en el fajín de María Santísima de la Encarnación, mientras sonaba de fondo El Canto a San Gregorio interpretada por la Banda Municipal. Muy emocionados, esperábamos la ansiosa llegada de nuestro patrón.
Aparecía la
Cruz de Guía de la Cofradía por la calle, y ya empezaban a aparecer los nervios. Las andas se posaron en un altar preparado por la directiva de la Encarnación. Mientras hacíamos la entrega de un ramo de flores, sonaban de fondo los sones de la marcha "Virgen de la Encarnación" con la cuál, terminó de subir la calle la procesión.
Pasada ya la banda, personas, etc, Eusebio Castilla se disponía a coger su guitarra y a cantar la canción titulada "Himno a la Virgen de la Encarnación", compuesta por él. La calle se quedó en silencio, apenas se escuchaba la banda a los lejos, y él comenzó. Todos nosotros formando una medialuna delante de Ella, gente asomadas a los balcones y personas que pasaban y se paraban a ver el momento, cantábamos juntos. Así, terminábamos otro de los grandes días que hemos tenido con Ella de los muchos que habrán.
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